"Dime que sabes de qué hablo cuando te digo que quisieron que muriera, que nunca más volviera a aparecer",dijo el artista." Aquel que lo tiene todo no necesita más, ni siquiera lo que tiene", dijo una voz.
El harapiento, sin casa, sin dinero logra con su inteligencia arrebatarle todo al rico aprovechando su momento de debilidad. Ahora el pobre es rico y quiere ser más poderoso." Limpiamente se quedó con tu casa y tu dinero", dijo otra voz.
Aquel que tenía, se quedó en las puertas pidiendo para poder comer porque no había guardado. No pensaba que un dia se vería en la miseria absoluta. Hundido en la oscuridad de su propia pobreza y soledad vió cómo brotaban sus lágrimas incontroladas, sus manos nerviosas que vibraban sin encontrar consuelo en ninguna parte.¿Dónde estaban sus amigos, aquellos que le decian que le amaban?, ¿dónde estaba su familia a la que siempre había ayudado?
No había nadie. Estaban todos alabando al nuevo rico por su inteligencia. El zorro había conseguido las uvas.
Marchó y desapareció el viejo artista. Se quedó el nuevo genio y figura, joven con ideas nuevas. Así, el viejo se recluyó en la montaña y estuvo años escondido cuidando su huerto, pintando, escuchando el rumor del viento, observando el cambio de las estaciones. ¿Sabiais que siendo rico nunca tuve tiempo para esto?, decía. Y así descubrió su verdadera naturaleza.
Contento bajó un dia la montaña. Empezó una nueva vida cuidando su huerto, pintando, escuchando y observando el regalo de la naturaleza, amando, perdonando, dejando el paso libre.
Al enterarse el joven artista que el viejo había vuelto quiso volver a verlo. Al verlo tan feliz y que le saludara tan cariñoso se extrañó. Pensó que era un engaño y que algo estaba tramando para quitarle su trabajo,su casa y su dinero y se alejó.

Hay miedo, hay avaricia y nos ciegan, no dejan ver cual es la belleza del verdadero arte. Hay un arte verdaderamente, por encima de todo, dentro de la sencillez, de la bondad y de la generosidad.Hay otro arte oscuro que necesita dinero, que necesita empujar a tu compañero para conseguir un prestigio y un trabajo que está también en el mundo real. Hay que elegir qué arte queremos dominar para vivir.