sábado, 5 de marzo de 2016

El arte de vender mentiras









La vida, me decía el otro día un amigo, es un campo de batalla donde la utilización de la imaginación para sobrevivir es fundamental. Si te dedicas al comercio, me decía, tienes que conocer muy bien el terreno donde te mueves para saber como conquistar al amigo y al enemigo.

La publicidad es un área de trabajo donde hay enfocar al máximo para saber vender. Se quejan los analistas y críticos de la venta por medio de  mensajes subliminales o directos sexistas que contienen la mayoría de los anuncios televisivos.

Se vende una imagen de la mujer perfecta a los ojos del marketing muy ofensiva para los que pensamos diferente. Hay anuncios donde las mujeres se depilan el sobaco que ya está previamente depilado, mujeres delgadas que se ponen pantys adelgazantes que a saber para qué los necesitan...mujeres que comen yogures light que están en los huesos, ni decir los cuerpos 10 acariciados por hombres con sus tabletas de mirada poderosa y con deseo ávido en anuncios de perfumes, indicándonos lo importante que es el olor corporal y las feromonas de la pasión para resultar atractiva....y así, hasta cansarse.

Por eso, resulta atractivo que aparezcan anuncios diferentes donde se les indica a los hombres y a la sociedad la conducta ofensiva de la humillación sexual. Esos que hablan de igualdad, de respeto, de que hay que ser como uno es, gordo, alto, guapo, feo, sin traumas.

Muchas mujeres trabajadoras y no trabajadoras han sido victimas de acoso sexual, de humillación pública o privada y encima, sin poder demostrarlo con pruebas o por miedo, por la propia vergüenza . Así, he visto a mujeres, aguantando y tragando el desprecio de compañeros y compañeras por las acciones de un agresor , un adversario fuerte, un superior que ha sabido vender muy bien su imagen a la sociedad y que es difícil de ser desenmascarado. De esta manera, muchos maltratadores se ocultan ayudando en ONGs, vendiendo paz y amor en organizaciones religiosas legalizadas o sectistas, vendiendo un papel de víctima y de discriminación, cuando en realidad hay una mente truculenta y manipuladora detrás de ellos, vendiendo humo con su carisma destructor.

Dentro de 3 días se celebra el día de la mujer trabajadora y os pido a todos una reflexión sobre ello, un esfuerzo para no disculpar la violencia de género, la humillación y el acoso sexual, el miedo a decir la verdad y que esa verdad nos haga libres.
Si justificamos ese arte de vender sexo, belleza en lata, mentiras arriesgadas, la imaginación de los hipócritas y nos convencemos de que la verdad encubierta es una mentira estaremos ayudando al maltrato, a la discriminación sexual y a cosas peores que se generarán de ello mismo.

" Cuando la guerrera más valiente está en medio de la batalla, su mente y su cuerpo están en el miedo, pero aún así se agarra al coraje de su espíritu y continúa hacia adelante".
Shankaracharya

Feliz 8 de marzo a todas.