viernes, 7 de septiembre de 2012

El arroz







Fue en una película donde escuché esta bella frase que me conmovió. Dice así: "Los plantones de arroz deben de plantarse no demasiado juntos, puesto que si lo haces así, no crecen y mueren: tienen que estar más separados para vivir en paz".
En la armonía tradicional se dice que hay consonancia  cuando las notas tienen la distancia acertada, puesto que si la distancia es excesivamente corta o distante se puede producir una disonancia.

En una orquesta, cada músico ocupa su sitio y su espacio. Nadie interfiere en el espacio del otro, porque si esto sucediera se golpearían y se molestarían impidiendo que la música sonase correctamente.

No se puede obligar a nadie a convivir o a tolerar a quien no quiere o no desea conocer. Así suceden desgracias todos los días en el mundo de personas que son asesinadas o agredidas vilmente porque la justicia desoyó las quejas de estas victimas.

Así pues, somos como plantas de arroz, que compartimos la misma tierra y el mismo agua. Compartimos el sol que nos hace crecer. Podemos hablar en la distancia corta y convivir agradablemente o con cortesía, luchar por los mismos ideales aunque nuestros planteamientos sean diferentes, ser nosotros mismos.

Ahora cuando sostenga mi plato de arroz recordaré estas palabras que son palabras de paz y espero que así os suceda a vosotros.