martes, 22 de octubre de 2019

Tu tarde







Si yo también, como decía Jose Luis Borges, resbalara " por tu tarde como el cansancio por la piedad de un declive ", mis ojos dejarían de respirar tus horas perfumadas cuando se mueven tan sigilosamente a mi lado.
La perseverancia no tiene nada que ver en esta lucha con condena similar a la de otros juicios impugnados por la no violencia. Estamos en continua guerra comandados por los intereses de los particulares, de unos pocos y da igual quien muera, quien viva.

Sí que me agoto de luchar, pero persisto. Y en ese cansancio, se funden mis recuerdos adormecidos de amapolas, también la tristeza de ver que nada cambia con la injusticia de la vida, que nos regala lluvia ácida o deshielos en el Ártico.

Adoro la perseverancia de los locos artistas que anhelan deslizarse dentro de la belleza, y derretirse en sus pensamientos y que el cansancio o la pereza nunca les contenga seguir amando.
Me llaman demente. Pero demente es el que sucumbe ante el poder, la avaricia o el orgullo de la dominación. Luchadores locos, a pesar de las mordazas, denuncian la tiranía o lo injusto con su arte, sus palabras, su música.

Y eso si que tiene poder y duele...
Lo más hermoso de la vida es que mis vísperas, mi ocaso, mis amaneceres, siguen siendo para ti.
Amo tu tarde.