La palabra Riff es un término derivado de la combinación de las palabras ritmo y estribillo (Rhythm- Refrain) y se utilizó como un sinónimo de "idea musical" con el nacimiento del jazz y el rock& roll.
Algo diverso, aunque analógico, sucedió en el Romanticismo musical con el leitmotiv o idea principal, cuyo impulsor fue Ch.Berlioz en su "Sinfonía fantástica" y su obsesión con la amada ,introduciendo la idée fixe en su obra.
El éxito de una canción depende muchas veces de que la melodía sea pegadiza, tenga el gancho suficiente para traspasar al corazón de los oyentes. Abundan tostones repletos de complejas ideas, con armonías embrolladas donde falta el alma de una idea musical coherente. También hay canciones a pasto, zafias donde las haya, que han tenido un reconocimiento increíble e inexplicable para oídos finos, cultos y delicados.
Gracias a la calidad expresiva, hay obras inmortales, con cuyos riffs o leitmotivs maravillosos, permanecerán por los siglos de los siglos en nuestras vidas, representando siempre a una generación de soñadores, locos, amantes de la música bella por excelencia y que nos harán siempre regresar, cual máquina del tiempo, a un momento de nuestra vida o a un fragmento de la Historia, para emocionarnos como si estuviéramos allí.
La creación de estos motivos pueden ser muchas veces producto de la casualidad, de la inspiración del momento, como cuando G. Tartini escribió "El trino del diablo" después de una experiencia onírica.
Desde lo frío de una melodía matemática o calculada, o desde una simple escala sin prestar atención a ningún tipo de emoción...de todo he escuchado, hay de todo en esta vida, pero ahí entra en juego un factor muy importante: la calidad de la interpretación y el saber buscar donde puede temblar un alma al escuchar lo abstracto o lo diferente.
Por último, un reconocimiento a aquellos que se arriesgan y crean sus propias ideas sin importarles la posteridad o el recuerdo futuro, tan solo su propia realización. Que la vida les colme de satisfacciones y alegrías. Amén.