domingo, 15 de febrero de 2015

El duelo artistico




Los duelos son enfrentamientos practicados ya desde la Edad Media, evolución de las justas medievales. Cuando sucedía un desacuerdo entre grupos armados, cada grupo seleccionaba su campeón para combatir con unas reglas previamente acordadas y con unas armas de acuerdo a esas normas. En las peleas individuales, se solía escoger un padrino que vigilaba que el reglamento se cumpliera y a veces, dependiendo de la resolución del combate, se enfrentaban entre los padrinos o simplemente tomaban acta de lo sucedido avisando a los allegados de las muertes o heridos.

En algunos países  era típico retar a un duelo lanzando un guante sobre el rostro del enemigo y si ese guante era recogido, quería decir que se aceptaba el desafío. En otros sitios se abofeteaba la cara del oponente. Las armas eran diferentes: pistolas,  espadas, puños, sable, florete...
Cuanto más grave era el insulto, más cerca debían de ser los pasos a dar antes de girarse a disparar con las pistolas. Un tiro certero que decidía quien vivía para contarlo y quien no.

Los músicos, sobretodo en el periodo Clásico-Romántico, fueron muy creativos y son famosos los duelos musicales donde se hacían verdaderos enfrentamientos  para determinar quién era el mejor artista. Mozart , Salieri , Clementi , Haendel, Listz, Scarlatti, Clara Wieck , Mendelssohn...fueron algunos músicos que tuvieron este tipo de "intercambios" de genio y chispa en su época.

S. Rachmaninoff compuso una preciosa obra basada en una obra de N. Paganini titulada "Rapsodia sobre un tema de Paganini" del que hay una parte llamada " Extracto sobre un duelo a espada". Música descriptiva que nos hace remontarnos a una guerra de espadas de caballeros. El tema principal forma parte del capricho nº 24 para violín solo de N. Paganini.
La obra es más extensa e incluye en otra de las variaciones un tema de la sinfonía Heroica de Beethoven y en otra el Dies Irae.

La variación nº 24 es de una extremada dificultad, un verdadero reto para cualquier pianista virtuoso. Se cuenta que cuando S. Rachmaninoff la estrenó rompió su regla de no beber alcohol y se puso sobre el piano un vaso de crema de menta para poder sosegar sus nervios. Por esto se llama a la variación nº 24 la variación de"la crema de menta".
Isabel Bravo©